martes, 15 de noviembre de 2011

Antiglobalizaciòn -Estados Unidos : desalojan la acampada de Oakland con 32 detenidos.... Joshua Holland / S. Burrach | Alternet.org |Kaos

Traducción de Burrach para Kaos en la Red
Aproximadamente a las 5 am, cientos de policías antidisturbios se dirigieron al campamento Occupy Oakland, situado en la plaza Frank Ogawa y demostró definitivamente que las tácticas de control de multitudes híper-militarizadas que trajeron tanta atención nacional durante las últimas semanas fueron usos innecesarios de la fuerza.
Para ejercer el desalojo han contribuido varias agencias de policía que han llegado a aglutinar a 1.000 agentes, según los informes. El desalojo comenzó cerrando un perímetro amplio alrededor de la plaza, que fue trasladándose progresivamente hacia arriba, calle por calle, en líneas gruesas, hasta que la masa de manifestantes fue empujada en la intersección de la 14 y Broadway. Entonces, una falange grande de la policía se trasladó a la misma plaza, donde detuvieron a 32 personas que habían optado por permanecer en el campamento en un acto de desobediencia civil.
En un momento, la policía arrestó cerca de una docena de personas que se había acurrucado en un círculo de oración en silencio en la carpa de las religiones.

Cuando salí, la policía estaba derribando las tiendas y despejando la plaza. No hubo reportes de heridos, según un observador del National Lawyers Guild que observaba la escena.
Fue una maniobra llamativa llevada a cabo por las agencias de seguridad área de la Bahía, trabajando en cooperación con el Departamento de Policía de Oakland, que ya las contrató previamente el 25 de octubre y la noche del 02 de noviembre. Las técnicas policiales de control de masas rara vez son del agrado popular, la imagen de ver a gente enfrentándose a los antidisturbios en las acampadas a lo largo de todo el país probablemente no dan una buena fama, pero menos aún el abuso de la fuerza usada durante el primer desalojo de Occupy Oakland - y durante las protestas posteriores a la noche siguiente.

Las explosiones y el gran volumen de disparos hicieron estas acciones excesivas. El amplio uso de granadas flash-bang, gases lacrimógenos y proyectiles "menos letales" desplegados por la policía dolieron como las imágenes de la escena inicial de la película Salvar al soldado Ryan. Las armas usadas por la policía no están diseñadas para matar o mutilar (si se utilizan correctamente), pero la sensación de caminar por las calles esquivando las explosiones y los agentes químicos mientras sientes crujidos en el aire crean un efecto similar al de un combate real - terror, desorientación y una sensación de inquietud que persiste por varios días.
Las armas provocan heridas – la factura de los días 25 de octubre y 2 de noviembre fue: tres manos rotas, dos lesiones craneoencefálicas (una de ellas, la del veterano en la guerra de Iraq, Scott Olsen, fue muy grave), una rotura de bazo y tantas lesiones leves que sería muy costoso catalogarlas.

Esta mañana, la policía, sacudida por la mala publicidad, simplemente optó por un método diferente para lograr el mismo objetivo. A diferencia de las noches anteriores, esta vez optó por seguir el libro Tratado de directrices para la gestión de la desobediencia civil en California (PDF): “Sólo un uso de fuerza objetivamente razonable puede ser utilizado para detener a los infractores y restablecer el orden”.
Los agentes introdujeron otra novedad con respecto a las prácticas del pasado, dejaron protestar a los manifestantes. Mientras que en la noche del 25 de octubre la policía emitió una serie de órdenes de dispersarse - y luego desató una andanada de armas no letales cuando estas no se cumplieron, esta vez simplemente dejaron a la multitud echar humo y desgastarse. La policía levantó barricadas manualmente para mantener a los manifestantes en la intersección, donde cantaron durante una o dos horas antes de perder fuerza y de dispersarse, sin violencia y por su propia voluntad.
El único punto en común del desalojo de esta mañana con el anterior es que el final del juego no está tan claro. Los manifestantes prometieron una vez más recuperar la plaza tan pronto como la policía la abandonara. Según los informes, el ayuntamiento de Oakland ha ofrecido la divertida propuesta de contratar guardias privados de seguridad para mantener la plaza despejada, pero siendo Oakland una ciudad con problemas de liquidez, uno tiene que creer que los ocupantes durarán más en la plaza que el presupuesto que se pretende aprobar dedicado a la seguridad privada.

Mientras tanto, los acampados han hecho otra convocatoria a las 4 pm en la sucursal principal de la Biblioteca Pública de Oakland. Queda por ver si la ciudad es más inteligente, si seguirán prevaleciendo estrategias de control de masas menos violentas.




Fuente, vìa :
http://www.kaosenlared.net/noticia/centenares-policias-antidisturbios-desalojan-acampada-oakland-32-deten

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